Taller de arte para peques basado en la exposición 'La Casa Iluminada'
Museos con niños en LeónLa exposición temporal ‘La Casa Iluminada’, del artista leonés Eduardo López Casado en Museo Casa Botines Gaudí está repleta de color y resulta muy atractiva para una visita en familia. De todos modos, para hacerla más asequible y adecuada para los peques, desde el Departamento de Educación del museo han preparado un taller, Sorpresas en la Casa Iluminada, con el que conocerán la obra del artista y experimentarán ellos mismos con sus creaciones.
Este taller se celebra los segundos sábados de cada mes y está dirigido a edades entre los 5 y los 12 años. Los próximos serán el 9 de marzo y el 13 de abril.
Nada más llegar ya les llamará la atención que algunas obras se encuentran en lugares no habituales ya que el artista ha intervenido la escalera, los patios y los torreones de la Casa Botines. La responsable del DEAC, Paloma López, les contará un cuento sobre Eduardo y su arte para acercar la exposición a los más peques. Después los animará a buscar distintas formas y figuras entre las obras. La idea es que se muevan con soltura por la muestra y vayan quedándose con detalles que les irá explicando Paloma.
Tras recorrer las distintas salas, llegará el momento de crear su propia obra, que luego formará también parte de la exposición. Y, por último, se convertirán en guías del museo con todo lo que hayan aprendido durante la mañana.
El taller es de 10 a 14 horas y las inscripciones pueden realizarse a través de la página web de Museo Casa Botines Gaudí.
Un proyecto para el arte contemporáneo
Esta exposición temporal es la primera del proyecto Hilos Cruzados, con el que el museo pretende abrirse a la creación contemporáneo permitiendo a un artista intervenir en algunos de sus espacios más representativos.
La muestra está formada por 71 obras entre las que hay pintura, escultura, dibujo, bordado e instalación. El autor recupera en ellas las enseñanzas de Gaudí: la inspiración en la naturaleza, la reivindicación del trabajo manual y de la interdisciplinariedad artística y el protagonismo del color. Pero, sobre todo, López Casado recupera de Gaudí la idea de la creación artística como forma de cultivo de lo espiritual y de la vida como un camino de purificación hacia la trascendencia, en el que el arte tiene una importancia fundamental. Con todo ello ha creado una profunda reflexión sobre el papel del arte y del artista en un mundo siempre necesitado de alimento espiritual.