Ruta hasta la Cueva de la Vieja del Monte
Sin categoríaLa ruta de la Cueva de la Vieja del Monte es muy sencilla y adecuada para familias. La distancia del recorrido es de unos 6 kilómetros entre ida y vuelta y tiene el aliciente para los peques de encontrarse con la cueva donde cuentan que la Vieja vive y elabora el pan para los niños.
La Vieja del Monte es un personaje mitológico de los pueblos de la montaña de León. Cuando los padres regresaban de las largas jornadas de trabajo, volvían con unos trozos de pan para sus hijos a los que contaban que se los había dado la Vieja del Monte para ellos. Les decían también que esta mujer vivía en la montaña, en una cueva, y que allí tenía un horno en el que elaboraba esos panes. No es fácil verla –se cuenta- porque suele andar por el monte recogiendo avellanas y otros frutos, pero podemos curiosear un poco entre sus cosas.
La ruta comienza en la localidad de Riaño, en el extremo del viaducto más alejado del pueblo. Dejamos el coche en alguna de las zonas habilitadas junto a la carretera, aunque es mejor no ir muy tarde para encontrar sitio. Es una ruta muy frecuentada que además comparte tramo con otras por lo que nos encontraremos bastante gente.
Nos introducimos en la ruta siguiendo el cartel de inicio y nos adentramos en un pinar. Después recorremos el camino que bordea el pantano desde el que vamos observando la belleza de los picos que nos rodean. El terreno es muy sencillo y llano. Cuando lleguemos a una bifurcación, debemos elegir el sendero de la izquierda que se introduce en el hayedo de las Viescas. Por aquí llegaremos hasta el camino que arriba a la cueva. Está indicado con un cartel que nos muestra que debemos ascender hacia la izquierda. Es la única complicación de esta ruta. Una pequeña subida en la que hay que tener precaución para no resbalar con las piedras sueltas.
Arriba nos espera un panel informativo sobre la Vieja del Monte y, por fin, la cueva. Una chaqueta colgada en un perchero hecho con ramas, algún cesto, el horno, varias velas… Un rincón con mucha magia.
Desde aquí regresaremos al punto de inicio por el mismo camino.
La jornada se puede completar con otras propuestas en Riaño, como visitar el columpio gigante, conocer el Museo Etnográfico, pasear junto al pantano, navegarlo disfrutando de los Fiordos Leoneses o descansar sentados en el banco más bonito de León.